Felicidades a todos los Riders. El esfuerzo es como para darlas.
Esto es una verdadera prueba de fatiga, y más con nuestras motos. Por eso hay que prepararla con un mínimo de previsión e ir mentalizado al tute, sin demasiadas distracciones y con el objetivo de rodar bien metido en la mollera. Parar 10 minutos más de la cuenta significa tirar a la basura todo lo que te has desgüevado en los últimos 100 Km de curvas.
Si nos referimos a las Harleys, esto es como si los de BMW, KTM, Teneré y compañía hicieran un descenso de montaña con una mountain bike de carbono, y nosotros lo hiciéramos con una BH de paseo. No hay color, lo nuestro es mucho más meritorio. Ni control de tracción, ni suspensiones electrónicas, ni modos electrónicos de conducción, ni control de crucero, etc...: dos ruedas, un motor y cojones.
Te sientes un poco raro rodeado de tanta nave espacial, pero a la vez sabes que estás haciendo algo especial y que el trance depende algo más de tu esfuerzo y habilidades que de la tecnología que llevas encima.
SUPER y yo lo preparamos un mínimo, lo justo como para que todo haya ido sobre ruedas. Primero, él lo tenía muy claro, con la moral y la motivación al 100% para conseguir el objetivo. Eso fundamental.
Luego, en una salida previa, comprobamos ritmos parecidos, autonomías similares (Road King y Sportster tanque grande), y gran sincronización en las paradas, sin tiempos muertos excesivos. Con todo esto, con la ruta bien metida en un GPS y entusiasmo para superar los problemas que van saliendo, hemos completado la Rider 1000 en el tiempo previsto. Calculábamos llegar entre las 00:00 y la 01:00, y llegamos a 00:30. Hicimos 1.080 Km.
Y lo mejor, disfrutamos cada kilómetro.:cachondon:
