Mucho. Muuuucho mucho, pero que muchísimo, y he tenido dos.
Y la sudafrikaaner ésta que vende el holandés tiene de militar lo que yo... ya que no hay diferencia alguna entre la civil y la militar salvo los aditamentos militares: Chimeneas de vadeo pegaditas a la pierna derecha del chasis, llave de contacto SIN LLAVE que sí tiene, supresor sobre la dínamo (enorme), cuentakms. que sí tiene, claxon -exclusivo militar-, `BANDEJA´de blindaje de los bajos de la moto (se podía tumbar la moto en el suelo y utilizarla como trinchera portátil, y doy fe que es así-), el complicado sistema de filtro de aire, los pilotos del tablero (de celuloide, uno rojo y otro verde Y CON TRAMPA debajo, jiji), el pedalín de arranque (que sí tiene también), el faro de combate (black-out headlamp) superespecial, la pareja de pilotos traseros (uno de rodar y otro de combate) con conexiones de bayoneta exteriores y antihumedad , línea eléctrica doble embreada para los mismos, piloto cat-eye en el guardabarros delantero, línea embreada para el mismo, carburador de un solo rodete ("power") de chiclé externo, porque al ejército se le pasaron motos super-super-simplificadas, o sea, chiclé de bajas y medias fijo.
Lo más emocionante de esta moto es el cuidado con que le han grabado el núm. de chasis. Esto es completamente legal, porque las Harleys no tenían. De hecho, salvo la m´tica Indian, ningún vehículo a motor americano llevó núm. de chasis hasta bien entrados los sesenta. El núm. legal (V.I.N.) era y sigue siendo el núm.motor, que en el caso de ésta Harley es asombroso el estado de conservación de la estampación.
Por cierto, el soporte del asiento era ligeramente más corto (pulgada y media) que el civil, yendo un pelín más adelantado el piloto.
Para disfrutar de estas motos en un plano ya casi casi obsceno se debe uno bajar de algún lado la película que dije: "Born to Ride", con John Stamos, estrenada aquí con el equivocadísimo título de "Nacido para correr".
scuro: